Pagar a medias o compartir cualquier gasto siempre ha sido
una situación muy común entre grupos de amigos y familiares. Pagar por separado
una cena, por ejemplo, no dejaba de ser un engorro entre los comensales al
tener que sacar todos las billeteras y arreglárselas con el cambio del dinero
en efectivo. O, en su defecto, se saldaban las cuentas a través de
transferencias bancarias. Pero, desde octubre de 2016, contamos con Bizum,
esa aplicación que permite hacer pagos y cobros entre usuarios particulares, poniendo
fin a la necesidad de solucionar los problemas que los consumidores tenemos con
los pagos compartidos.
El primer intento de envío de dinero de un móvil a otro
surgió de la mano del Banco Santander, Telefónica y CaixaBank allá por el 2014
y se llamaba Yaap Money. No tuvo apenas éxito, pero año y medio después
apareció Bizum para quedarse y masificar su uso entre las generaciones
más jóvenes.
Bizum se crea a partir de la iniciativa de
un grupo de bancos españoles para facilitar las transferencias particulares e
instantáneas entre los usuarios que estén asociados a dicho servicio. Para
ello, el conjunto de la banca construye la Sociedad de Procedimientos de Pago, siendo
la compañía responsable de gestionar la aplicación y la responsable de la
coordinación entre las diferentes entidades bancarias.