En su libro “De
Cero a Uno: cómo inventar el futuro” (Zero to One: Notes on Startups, or how to
build the future) narra sus principios de cómo invertir en las startups,
afirmando que este tipo de empresas están basadas en una idea única y diferente
que los demás consideran equivocada. Según Thiel, una empresa emergente tiene
que ser capaz de apresar todo el valor que genera y tener la posibilidad de
convertirse en monopolio.
A Thiel le
surge la idea del libro en un curso que dio a emprendedores en la Universidad
de Stanford. En él ha intentado plasmar toda su experiencia como cofundador de
PayPal, de Palantir Technologies y como inversor de empresas tan sobresalientes
como Facebook y Space X, abordando la idea de cómo construir compañías capaces
de crear algo nuevo que antes no existía. El texto no enseña cómo crear una
startup, pero sí da una serie de consejos e ideas que servirán a los futuros
visionarios para diferenciarse de la competencia.
Al adquirir
este libro me ocurrió algo que nunca me había ocurrido con otro. Antes de
adquirir uno suelo ojearlo y, en ocasiones, lo reconozco, los prejuzgo por su
tamaño. En este caso, era un texto corto, pero me cautivaron de inmediato sus
dos primeros párrafos del prefacio: ya no fui capaz de deshacerme de él. Los
trascribo aquí de forma literal por si a algún lector le causa la misma
sensación que a mí:
“En el mundo
de los negocios cada instante es único, jamás se vuelve a repetir. El próximo
Bill Gates no construirá un sistema operativo. (…) Si lo que haces es copiar a
estos tipos, salta a la vista que no has aprendido nada de ellos”.
“Por
supuesto, es más fácil copiar un modelo que hacer algo nuevo. Hacer algo que ya
sabemos cómo hacer lleva al mundo del 1 a n, añadiendo más de lo mismo.
Pero cada vez que creamos algo nuevo, pasamos del 0 al 1. El acto de creación
es único, como lo es el momento de creación, y el resultado es algo fresco y
singular”.
Para el autor
el progreso puede adoptar dos formas totalmente diferentes: una, horizontal,
basada en copiar cosas que ya existen, como es el caso de algunas empresas
chinas. Y, otra, vertical, que se basa en la creación de cosas nuevas, como es
el caso de las empresas de Silicon Valley. Para explicar un modelo u otro pone
el ejemplo de la máquina de escribir: si a partir de una máquina de escribir se
hacen clones estaríamos ante un progreso horizontal apoyado en la globalización;
por el contrario, si a partir de una máquina de escribir se construye un
procesador de textos estaríamos ante un progreso vertical apoyado en la
tecnología. De esta forma establece que “para triunfar en los negocios hay que
hacer lo mismo que una startup: cuestionar las ideas recibidas y repensar el
negocio desde cero”.
El futuro no
está en un décimo de lotería premiado, el futuro depende de la propia
exploración disruptiva. La ciencia está plagada de ejemplos: Galileo,
Pitágoras, Newton… Sus ideas eran novedosas y totalmente diferentes a las
existentes en su momento, es verdad que aquello era otra época: pensar
diferente te podía llevar a la hoguera. Por eso, este libro, lleva al lector a
un ejercicio de pensamiento que le hace ver las cosas desde un punto diferente
al de la creación, afianzándose en tres ideas principales: los mayores saltos
en el progreso de la ciencia han sido de forma vertical (el desarrollo real
parte de la creación de algo que antes no existía); los monopolios son buenos
para los negocios y para la sociedad (según Thiel, el monopolio es positivo
porque es el resultado de algo que está bien hecho y nadie puede superarlo); y,
el fundador de una startup cualquiera necesita ser visionario con el fin de
llevar su negocio de cero a uno (para crear algo nuevo hay que estar seguro de
lo que se quiere conseguir).
Este libro no
es un manual que muestre fórmulas para la creación de una empresa ni cómo
gestionarla para que prospere. Es un conjunto de pensamientos filosóficos y estratégicos
de un visionario y creador de startups más que exitosas. Es recomendado por la
Universidad de Stanford a los alumnos de los cursos de emprendimiento,
sirviendo también para aquellos que reflexionan sobre qué es lo que más les
interesa en la vida.
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