Mostrando entradas con la etiqueta Finanzas Conductuales. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Finanzas Conductuales. Mostrar todas las entradas

17 de junio de 2025

La lógica ilógica de los mercados financieros

Foto by pixabay.com
¿Por qué los mercados suben cuando todo parece ir mal? ¿Por qué bajan tras publicar buenos resultados? ¿Por qué los inversores huyen cuando los precios están bajos y se lanzan en masa cuando ya están por las nubes? La respuesta, aunque suene contradictoria, tiene mucho de lógica… ilógica. Porque los mercados financieros —y buena parte del comportamiento económico— no se rigen por la fría racionalidad matemática, sino por una mezcla compleja de emociones, sesgos, expectativas y efectos de grupo.

Esta tribuna divulgativa pretende explicar, de forma accesible y con ejemplos prácticos, por qué los mercados se comportan de forma que muchas veces parece absurda, pero que en realidad responde a mecanismos psicológicos y dinámicas sociales profundamente humanas. En otras palabras: cómo entender la aparente irracionalidad de los mercados y qué lecciones prácticas puede extraer el inversor doméstico o cualquier ciudadano curioso.

Economía y psicología: una relación inseparable

Durante décadas, la teoría económica clásica se basó en un supuesto: el ser humano es racional. Según este modelo, las personas toman decisiones lógicas y maximizan su beneficio. Pero en la vida real, esto rara vez ocurre. Las decisiones económicas —incluidas las de inversión— están profundamente influenciadas por emociones, intuiciones, miedos y anhelos.

Aquí es donde entra en juego la economía conductual, una rama que ha ganado terreno al demostrar, con evidencia empírica, que los individuos no siempre actúan como autómatas racionales. Sesgos como el exceso de confianza, la aversión a la pérdida o el efecto anclaje (se toman decisiones basadas en el primer dato que reciben, aunque sea irrelevante) explican buena parte de los comportamientos “extraños” en Bolsa. Por tanto, entender los mercados requiere también entender al ser humano.

3 de junio de 2025

Vender lo bueno y aguantar lo malo: el sesgo conductual que arruina carteras de inversión

Foto by pixabay.com
En el ámbito de la inversión financiera, algunos de los errores más costosos no provienen de la ignorancia o de una mala selección de activos, sino de un factor mucho más difícil de controlar: las emociones humanas. A pesar del avance en herramientas, formación y análisis, la psicología sigue desempeñando un papel crucial —y a menudo perjudicial— en la toma de decisiones. Uno de los sesgos más frecuentes y destructivos en este terreno es el llamado efecto disposición, un fenómeno ampliamente estudiado dentro de la economía del comportamiento que lleva a los inversores a desprenderse prematuramente de los activos ganadores y a conservar en cartera aquellos que acumulan pérdidas.

Este comportamiento irracional ha sido documentado en numerosas investigaciones académicas desde que fue definido en los años 80 por los economistas Hersh Shefrin y Meir Statman. A pesar del tiempo transcurrido, su vigencia es absoluta, y continúa lastrando los rendimientos de millones de carteras en todo el mundo.

26 de septiembre de 2024

¿Qué son y cuál es el objetivo de las Finanzas Conductuales?

Foto by pixabay.com

Durante el transcurso de la vida se deben de tomar multitud de decisiones económicas, unas más importantes que otras, pero todas las veces estarán influenciadas por determinadas prioridades, por el tiempo de espera, por los beneficios a obtener o por un acontecimiento inesperado. Sin embargo, no todo se basa en la racionalidad, porque el comportamiento del ser humano no siempre es racional y el mundo de las inversiones no es diferente. El sector financiero y económico se han convertido en áreas de conocimiento esenciales para el funcionamiento de la sociedad y del mercado de cada país.

En su momento, Aristóteles afirmó que el hombre es un animal racional, siendo esta definición la tesis de la teoría financiera clásica que decía que los inversores son perfectamente racionales y que siempre consiguen tomar la mejor decisión en cualquier situación, actuando en base a una serie de investigaciones analizadas de manera racional. Pero la historia y las investigaciones empíricas han demostrado fehacientemente que las personas cometen sistemáticamente errores cuando se toman decisiones, no desde la razón, sino desde la irracionalidad. Evidentemente, esto también se aplica al mundo de las finanzas porque los inversores son emocionales. Y este es precisamente el origen de las finanzas conductuales o finanzas del comportamiento (Behavioral Finance) porque los mercados no son del todo eficientes y los inversores no son del todo racionales. Por tanto, las finanzas conductuales, como una combinación de economía, finanzas y psicología inversora, influyen directamente en la toma de decisiones del inversor.